fbpx

El ejercicio diario puede ayudar a los adultos mayores a evitar enfermedades cardíacas, muestra un estudio

El ejercicio diario puede ayudar a los adultos mayores a evitar enfermedades cardíacas, muestra un estudio, demostrando que es mejor tarde que nunca, los investigadores italianos concluyeron que 20 minutos al día de ejercicio moderado a vigoroso en la vejez temprana (70-75) puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas graves después de los 80.

Investigadores de la Universidad de Padua revisaron los datos del Progetto Veneto Anziani, un estudio de casi 2800 hombres y mujeres italianos de 65 años o más. Los participantes se sometieron a evaluaciones de antecedentes médicos y de salud de referencia entre 1995 y 1997, y se realizaron seguimientos cuatro y siete años después.

Utilizando los registros de mortalidad y alta hospitalaria, los investigadores estudiaron a los participantes hasta 2018. Aunque aumentar el ejercicio a una edad más temprana es más valioso para la salud del corazón, los hallazgos muestran que aumentar los niveles de actividad alrededor de los 70 años se asoció con un riesgo reducido de resultados cardiovasculares más adelante en la vida, El ejercicio diario puede ayudar a los adultos mayores a evitar enfermedades cardíacas, muestra un estudio, esto fue evidente entre hombres y mujeres que eran físicamente activos más adelante en la vida, con la mayor reducción relacionada con la enfermedad coronaria y la insuficiencia cardíaca en la vejez.

Los participantes que realizaron de 20 a 40 minutos de actividad moderada a vigorosa todos los días vieron los mayores beneficios. Las actividades moderadas incluyeron caminar y pescar, mientras que las actividades vigorosas se definieron como bailar, nadar, andar en bicicleta y hacer ejercicio en el gimnasio.

“El movimiento es medicina en una etapa avanzada de la vida”, escriben los investigadores, quienes alientan a los funcionarios de salud pública a promover la actividad física en la mediana edad y en los primeros años de la vida para reducir de manera efectiva los riesgos cardiovasculares. El ejercicio diario puede ayudar a los adultos mayores a evitar enfermedades cardíacas, muestra un estudio,“Incluso una pequeña cantidad de actividad física puede conferir efectos beneficiosos en las personas mayores”.

El estudio se publicó en línea el 16 de febrero en Heart , la revista de la Sociedad Cardiovascular Británica.

Puede que no termines de entender del todo el titular pero quédate con lo siguiente: ser una persona activa está muy bien, menos es nada, pero si quieres gozar de la verdadera salud hay que practicar ejercicio vigoroso.

Vivimos unos tiempos en los que todavía (cada vez menos) existe una discrepancia entre lo que divulgan los profesionales de la actividad física y lo que divulgan los profesionales de la medicina.

Pongamos un ejemplo. Es posible que te suene esa situación en la que un adulto mayor acude a la consulta del médico a revisar unas analíticas rutinarias y se descubre algún parámetro alterado, por ejemplo el colesterol. No es nada serio ya que el resto está bien pero es lo suficientemente significativo como para que el médico recomiende algo de estilo de vida activo. El paciente pregunta si andar es una buena opción ya que él ya lo hace. El ejercicio diario puede ayudar a los adultos mayores a evitar enfermedades cardíacas, muestra un estudio, el médico, encantado, asiente con conformidad y le anima para que siga haciéndolo.

Sin entrar a debatir si el tema del colesterol se podría afrontar con algo de dietoterapia, esta situación, aunque muy general, es muy típica. En lugar de andar podemos insertar cualquier otra actividad sin impacto como andar en bicicleta o nadar. A los médicos les encanta que nademos.

Hablo de esto con no poca experiencia ya que por un lado soy entrenador y dietista y me llegan constantemente casos parecidos. El médico recomienda andar o nadar, pero entrenamiento de fuerza o algún otro tipo de entrenamiento con un mínimo de intensidad, es ya difícil de ver.

También me ha pasado con mi madre de 66 años de edad. Ha sufrido durante años una osteoporosis y artrosis progresivas que han sido tratadas únicamente con vitamina D y calcio. Como entrenador ya me he encargado de tratar de convencerla para que entrenase pero claro, el médico no estaba de mi parte. Al final, recientemente, un médico me ha dado la razón y mi madre ya entrena la fuerza adecuada a sus capacidades. El ejercicio diario puede ayudar a los adultos mayores a evitar enfermedades cardíacas, muestra un estudio, está muchísimo mejor y sé que la osteoporosis avanzará a un ritmo menor.

Comentarios de Facebook